SALIF
KEITA.
Nació en una aldea en el centro de Mali. Es
albino debido a que una mutación de sus genes no permite a su cuerpo generar
melanina y dar color a su piel, pelo y ojos. Esto significa que el sol provoca
cáncer de piel en estas personas si no cuentan con protecciones muy especiales.
En su
país Salif no podía pescar ni cultivar el campo porque el sol daña su piel. Se
dedicó a estudiar teniendo muy buenos resultados pero el albinismo también
produce problemas de visión y Salif renunció a seguir estudiando la carrera de
magisterio.
Se dedicó a la música que era su vocación.
Realiza conciertos por todo el mundo y es el cantante africano más famoso.
En África las personas albinas sufren
marginación y rechazo de sus familias y allegados porque
creen que ser albino es una maldición: de padre y madre negros, tener un
hijo de piel blanca.
Salif Keita ha creado una fundación desde
2005 con sede en Estados Unidos cuya finalidad es crear conciencia sobre este
problema.
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